Así se deben preparar los cafeteros para afrontar el próximo fenómeno de El Niño

Los pronósticos meteorológicos indican que estamos próximos a vivir una época de sequía, producto del fenómeno de El Niño, que se caracteriza por un aumento en la temperatura y por la escasez de agua.

Para mitigar estos efectos en el sector cafetero, Álvaro Gaitán, director del Centro Nacional de Investigaciones de Café (Cenicafe), recomienda a los productores hacer seguimiento del desarrollo de El Niño, mediante la consulta mensual del Boletín Agrometeorológico que emite esta entidad.

El pronóstico de El Niño obliga a hacer las renovaciones de cafetales solo en los meses sugeridos y la necesidad de implementar sombríos transitorios en los lotes en levante, para proteger a las plantas en crecimiento.

“En localidades con déficit hídrico severo y moderado, se deben programar sólo dos aplicaciones de fertilizante al año, procurando que las plantas absorban la mayor cantidad de nutrientes antes que inicie el período crítico de sequía”, precisó.

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También recalcó que las altas temperaturas promedio aceleran el ciclo de vida de la broca del cafeto, con lo que se pueden presentar varias generaciones adicionales de esta plaga en una cosecha.

Para mitigar esta consecuencia, los caficultores deben incrementar los monitoreos de infestación en los lotes y aplicar las medidas recomendadas para su manejo integrado.

También deben realizar un manejo integrado de arvenses o (malas hierbas), que permita la presencia de enemigos naturales del minador de la hoja y de la arañita roja, de manera que no sea necesario el uso de insecticidas o acaricidas.

Adicional a esto, el experto sugirió que, para tomar las mejores medidas, los caficultores deben consultar al servicio de extensión de su vereda.

Jesús Hernando Cañas, productor de café del municipio de Riosucio, Caldas, advirtió que, “en la propuesta de manejo ecológico que hemos venido trabajando en la finca, no ha intervenido ni Cenicafe ni el Ministerio de Agricultura. Esta se ha realizado por iniciativa propia de la familia”.

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El productor dijo que “tenemos en cuenta varios elementos agroecológicos para la mitigación de El Niño, para la conservación, fertilidad y buen uso del suelo, se ha venido acompañando con prácticas de terrazeos para evitar la erosión y manejo de coberturas vivas. No hacemos aplicaciones de herbicidas, ni utilizamos herramientas mecánicas para las limpias”. Para la nutrición del suelo, producen los abonos orgánicos aprovechando los residuos de cosecha. También la siembra y uso de sombrío con buen manejo de árboles leguminosos y maderables.

“En el sistema de beneficio del café, hacemos el despulpado en seco, en el lavado minimizamos el gasto del agua, y aprovechamos el agua lluvia para esta actividad. Trabajamos el manejo de las fuentes de agua. Desde su nacimiento con la protección y reforestación con plantas propias de la zona”, dijo Cañas.

También acompañan esta actividad con los sistemas de descontaminación de las aguas servidas tanto domésticas como las de uso agrícola.

La llegada de este evento climático es muy probable

La mayoría de los servicios climáticos, incluyendo a la Organización meteorológica Mundial (OMM), pronostican que hay entre 60% y 70% de probabilidad de que haya un episodio con las características del fenómeno de El Niño entre junio a agosto, y entre 70% y 80% entre julio a octubre de 2023. Las autoridades están tomando las medidas pertinentes para evitar graves afectaciones en el sector agropecuario.