Federación Nacional de Cafeteros lanzó el contrato de protección de precio del grano

Este instrumento, que cuenta con un límite máximo de 50 cargas cada mes, se destina a fijar el precio mínimo interno, que combina la cotización internacional y la tasa de cambio. Con esto, los productores podrán protegerse en el corto plazo frente a las fluctuaciones del mercado a la hora de fijar el precio.

Luis Genaro Muñoz Ortega, gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros, indicó que: “de esta forma, esperamos que los productores no solo puedan optimizar su productividad y costos, a través de los exitosos programas de renovación en curso, sino, aprovechar la volatilidad y las coyunturas de precio favorables que les garanticen un ingreso mínimo escogido por cada caficultor”.

El modo de operación es sencillo.
Según la Federación, “al realizar la llamada desde cualquier punto, el productor podrá escoger tres opciones de precio garantizado: el precio de mercado del día de la llamada, un precio 10% superior y/o un precio 10% inferior, cada uno con un costo o prima diferente, el cual será descontado inmediatamente de la Cédula Cafetera Inteligente, requisito indispensable para quien se quiera acoger al mecanismo. Además, también tendrá la posibilidad de decidir directamente el número de cargas que quiere proteger.

Muñoz agregó que: “si el precio sube en el momento en que el productor vende su cosecha, la opción no se ejerce. Ahora bien, si por el contrario baja, el productor tendrá garantizado un precio mínimo. Los caficultores tienden a guardar el café en sus fincas esperando una subida en los precios, ello puede no resultar favoreciendo a los productores, pues se exponen a un deterioro en la calidad o a que los precios no se comporten como ellos esperan”.

Por su parte, Julián Medina Mora, gerente financiero de la organización consideró que: “vale la pena recordar, que como todo instrumento de protección, lo ideal sería no tener que ejercerlo, pero uno los compra es para tener garantías y cubrir riesgos. Con las volatilidades actuales del mercado, el riesgo de tener coyunturas desfavorables de precio en el momento de vender la cosecha no es menor”.

En este punto es importante tener bien claro la manera en la que se puede aprovechar la oportunidad y la manera en la que funciona este mecanismo.

Es por esto que la misma institución utilizó como ejemplo, el siguiente caso práctico:

Si un productor espera vender su cosecha en enero del 2013 y observa una coyuntura de precio interno favorable en noviembre 2012 puede realizar la compra del contrato de protección de recio en este mes, garantizando así el precio mínimo para su cosecha esperada en enero.

Si el productor decide proteger el precio de su cosecha de enero a los precios de noviembre, solo podrá proteger un límite superior de 50 cargas de café pergamino seco por mes disponible, información confirmará el Sistema de Información Cafetera (Sica).

Si al momento de vender su cosecha en enero los precios han evolucionado favorablemente, el productor puede aprovechar las mejores cotizaciones y no ejercer su opción de venta. Si por el contrario, éste cae en enero, el productor podrá vender a los precios escogidos en noviembre.

Para liquidar su seguro, el productor tendrá que demostrar a través de una factura comercial o equivalente que vendió su café en enero a un precio efectivamente inferior al del precio del instrumento.

Éste le reconocerá al productor la diferencia entre el precio de protección y el de de la factura de venta, valor que no podrá ser superior a la diferencia entre el precio de protección y el promedio del precio índice vigente.

“Continuamos promoviendo instrumentos que permitan vender la cosecha a un precio favorable para darle la oportunidad de aprovechar coyunturas de precios altos”, concluyó Medina Mora.