Soluciones de biotecnología para un mundo más sostenible

El gran reto de toda la sociedad es satisfacer las necesidades de alimento y salud de la población mundial, ya que de acuerdo con la ONU, la población se incrementará de 6.8 mil millones a 9.1 mil millones de personas para 2050. Estas proyecciones muestran que para alimentar a la población mundial siguiendo el esquema actual, se necesitarían cerca de tres planetas como la tierra, que proporcionen los recursos naturales para mantener el estilo de vida actual de la humanidad . 

Actualmente una de las herramientas que ha logrado avances en esta área es la biotecnología, que se refiere a “la aplicación de principios de la ciencia y la ingeniería para tratamientos de materiales orgánicos e inorgánicos por sistemas biológicos para producir bienes y servicios”. Este concepto describe el punto más alto de lo que el ser humano ha buscado por más de 10.000 años.  

La biotecnología se desarrolló desde un enfoque multidisciplinario involucrando varias disciplinas y ciencias. Entre los logros más destacados que ha alcanzado a nivel global se encuentran: 

-En los últimos 20 años los agricultores han aumentado el rendimientos de los cultivos en un 22%, con la siembra de los cultivos biotecnológicos.

-El desarrollo de una variedad de arroz resistente a las inundaciones utilizado por tres millones de agricultores en la India en 2012. 

-La posibilidad de cultivar bacterias que producen insulina humana (necesaria para personas con diabetes). Las bacterias son modificadas genéticamente y se les añade el gen para la producción de insulina. 

En Colombia, la agricultura ha cambiado en las últimas décadas gracias al desarrollo de la biotecnología. Un ejemplo de ello es la reciente innovación que se encuentra disponible en el mercado para lograr más productivos cultivos de maíz y algodón. 

Con base en biotecnología se han desarrollado plantas tolerantes al glifosato y/o al glufosinato de amonio; y tecnología que permite la incorporación de genes responsables de expresar proteínas del Bacillus thuringiensis (Bt) en la plantas que protegen del daño de los insectos plaga. 

Gracias a estos avances logrados, actualmente se ofrece protección contra los principales insectos en las fases clave del ciclo de la planta y tolerancia a estos herbicidas, posibilitando el control de un amplio espectro de plantas dañinas con mayor seguridad y flexibilidad, lo que permite que éstas se mantengan más saludables y menos susceptibles a factores ambientales de estrés durante el ciclo del cultivo.  Ayudando a reducir factores de costo de producción, como mano de obra, combustible, equipos e insecticidas, necesarios en los cultivos convencionales.  

Entre 2003 y 2015, Colombia ahorró 212,4 millones de litros de agua con cultivos de maíz y algodón genéticamente modificados, redujo 8.300 toneladas de CO2, y 3,1 millones de litros de diésel en tractores y pulverizadores.

La  información está disponible y los resultados en los campos, continuemos con la historia de la humanidad que está en constante evolución, para perpetuar su existencia en nuestro amado planeta tierra.