Colossal afirma que la edición genética podría crear un rinoceronte en cuatro años

Una empresa de biotecnología valorada en US$10.000 millones dijo que, junto con un consorcio de científicos de todo el mundo, pretende aplicar la edición genética y otros métodos y utilizar una madre sustituta para comenzar a rescatar al rinoceronte blanco del norte del borde de la extinción dentro de cuatro años.

ARTÍCULO RELACIONADO

Investigadores desarrollan spray capaz de mejorar la respuesta de los tomates a sequías

Colossal Biosciences Inc., la empresa con sede en Dallas que busca revivir animales extintos hace mucho tiempo, como los mamuts lanudos, anunció que podría colaborar con investigadores de países como Kenia, Alemania, Italia, Japón y la República Checa para producir un tercer rinoceronte blanco del norte. Este se sumaría a las dos últimas que quedan, las hembras Najin y Fatu, que viven en una reserva en la región del Valle del Rift de Kenia. Si este intento tiene éxito, se sumarán otros.

“Esto está a tres o cuatro años de distancia”, dijo Matt James, director de animales de Colossal, en una entrevista. “Será más fácil y económico recuperar la población hoy que si perdiéramos la especie por completo y luego intentáramos rescatarla de la extinción”.

La edición genética, y el objetivo de rescatar animales de la extinción, es una herramienta nueva y controvertida en la lucha por proteger la menguante biodiversidad del planeta, a medida que las actividades humanas dañan los ecosistemas y los privan de las necesidades de los organismos que los mantienen en funcionamiento. Aun así, algunos científicos han advertido que rescatar animales podría tener consecuencias impredecibles .

Madres sustitutas

ARTÍCULO RELACIONADO

Fedepapa plantea nuevas tecnologías para fortalecer sus capacidades productivas

La misión de rescate sin precedentes comenzó en 2015, cuando científicos de los cinco continentes se reunieron y formaron el Consorcio BioRescue para idear una estrategia para salvar a la subespecie. En ese momento, solo quedaban tres ejemplares de la subespecie: las dos hembras de la Reserva Ol Pejeta y un macho llamado Sudán, que murió en 2018. Colossalm, que no forma parte de BioRescue, firmó un acuerdo para potencialmente contribuir a la iniciativa en 2023.

En la década de 1960, estos animales se encontraban ampliamente distribuidos en África central y oriental; según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, se estimaba que había 2250 rinocerontes blancos del norte. Desde entonces, la población ha disminuido debido a la caza furtiva y ahora están prácticamente extintos, ya que no pueden reproducirse de forma natural.

La idea es utilizar los óvulos de las dos hembras restantes, que ya han superado su edad reproductiva óptima, y ​​el esperma almacenado para crear embriones que luego se implantarán en hembras sustitutas de rinoceronte blanco del sur, de las cuales más de 15.000 aún viven, principalmente en Sudáfrica. Los rinocerontes blancos del sur son ligeramente más grandes que la variedad del norte, que tiene orejas y cola más peludas.

Aun así, con el colapso de la población, la diversidad genética, esencial para una población sana de rinocerontes, se ha reducido. Será necesaria la edición genética para ampliarla mediante la extracción de ADN de rinocerontes muertos hace mucho tiempo.

“Nos dimos cuenta de que parte de la variabilidad genética del rinoceronte blanco del norte podría estar preservada en los trofeos o restos de animales cazados, digamos, hace 100 años”, dijo Jan Stejskal, coordinador del proyecto en BioRescue. “Un cráneo parece ser la mejor parte de la cual podemos recolectar una muestra”.

Se están solicitando muestras de museos de todo el mundo y de colecciones personales. Anteriormente se habían realizado intentos fallidos de implantar embriones en mujeres blancas del sur sin que se hubiera llevado a cabo ninguna edición genética.

Hasta la fecha, BioRescue ha estado creando embriones en Avantea, un instituto de reproducción asistida para animales en Italia, y los socios del grupo incluyen una variedad de universidades e instituciones kenianas.

“Esto es rescate genético sintético”, dijo James. “Se trata de usar herramientas de biología sintética para crear cambios específicos dentro de un genoma y así mejorar artificialmente la diversidad genética de una población en crisis”.

Más fácil, más barato

Colossal ha elaborado planes para recuperar animales de la extinción, desde el dodo, un ave no voladora que una vez vivió en Mauricio, hasta el tilacino, un marsupial carnívoro de Australia. Su mayor éxito hasta el momento se anunció en abril, cuando dijo que había creado tres lobos terribles, una especie popularizada por la serie de fantasía Juego de Tronos, pero que no se había visto en la Tierra en más de 12.000 años.

“Nos encanta la desextinción; creemos que es una actividad fascinante”, dijo James. “Pero siempre es más fácil y económico prevenir una extinción que revertirla”.