Limón y mango están entre los árboles frutales que le pueden sacar provecho al sol

En todo cultivo, una de las variables de mayor relevancia a tener en cuenta es el clima, no solo porque es determinante de otros factores como la humedad y la temperatura, sino por que hay siembras que se dan solo en ciertos pisos térmicos.

Los frutales son unos de los cultivos que requieren de mayor manejo agronómico, no solo porque pueden ser delicados en la etapa de floración sino porque hay unos que requieren del calor para ser más productivos.

“La importancia que tiene el calor en la producción de frutas de clima cálido, como mango, limones, cítricos, entre otros, es que es el factor que generalmente favorece el crecimiento y el desarrollo de estas frutas”, explicó Carlos Fernando Londoño, ingeniero agrónomo y coordinador de investigación en Asohofrucol.

El experto aseguró que el calor promueve que la planta tenga todo el proceso de energía y que mejore la fotosíntesis, “lo que nos ayuda a nosotros, quienes cultivamos, a que tenga un proceso eficiente y que todos estos productos sean más grandes, jugosos y dulces; y tengan una producción mayor”.

Aunque en el clima tropical hay algunos frutales que sufren menos estrés hídrico que otros, el calor puede ser un arma de doble filo dependiendo de la etapa de la planta. “Hay que tener mucho cuidado con el calor, si es excesivo y prolongado tendremos unos efectos muy negativos en los frutales donde están sembrados”, agregó.

La mayoría del tiempo favorece al productor, pero también toca analizar qué tanto calor hay en el ambiente para evitar efectos nocivos. “Cada productor y fruticultor debe entender que necesita contar con una fuente de agua o de riego, hay algunos que les ayuda la tolerancia al estrés hídrico, pero requerimos una fuente de agua que nos favorezca”, dijo.

Las etapas productivas que son de mayor cuidado son la polinización, puesto que daña la fertilidad; y cuando aparecen las flores. “Si aprovechamos el calor vamos a concentrar la energía en la planta y tendremos una mayor cantidad de fruta reflejada en precio y rentabilidad del cultivo”, concluyó.

En los climas tropicales y subtropicales, que nunca bajan de 3° C, se dan principalmente frutas como aguacate, guanábana, mango, coco o papaya.

Según Asohofrucol, con las cifras de cierre de 2022, los frutales con mayor área sembrada fueron el aguacate, con 125.388 hectáreas (ha) y 12% de la participación hortifrutícola, seguido de los cítricos, con 117.046 ha y 11%; mango, con 39.603 ha y 4%; la piña, con 31.193 ha y 3%; tomate, con 19.407 ha y 2%; y la mora, con 18.630 ha y 2%.

Antioquia es la región líder en hortalizas y frutales, con un total de 101.394 hectáreas sembradas y 10% de la participación nacional; seguido de Santander, con 67.346 ha y 7%; Cundinamarca, con 72.598 ha y 7%; y Valle del Cauca, con 66.125 ha y 6%.