Ecología, camino a la sostenibilidad frente a los retos de la producción alimenticia

Para tener una idea de la magnitud del sector, este mercado creció a una tasa del 9% durante el año 2011 en Estados Unidos, en contraste con un crecimiento de 1,7% del total de la economía de ese país.

En el mismo sentido, México multiplicó por 25 el número de hectáreas destinadas a esta actividad entre 1996 y 2012, pasó de 21.000 a 520.000 hectáreas, respectivamente. En Colombia, este sector que ha duplicado el número de hectáreas destinadas a esta actividad económica, pasó de 22.000 en el año 2000 a cerca de 50.000 hectáreas en 2012.

De otro lado, conforme las proyecciones demográficas estimadas de manera unánime por los principales organismos multilaterales, se estima que para el 2050 la población mundial crezca un 30% respecto al 2012.

Esta población, de la cual se espera que el 70% sea urbana, demandará por lo menos un 50% más de alimentos de los que hoy consume. Este crecimiento de la demanda será impulsado por la posibilidad de alimentarse más, mejor, y por más tiempo, dados los mejores ingresos y las mayores expectativas de vida la población.

El reto al cual se enfrenta el mundo es el de producir más alimentos y de mejor calidad para efectos de satisfacer la demanda inminente de un consumidor más exigente. Esto, unido a los retos de sostenibilidad que enfrenta el sector por el cambio climático, y uno de los mecanismos deseables para atender las necesidades esperadas sin afectar el medio ambiente, consiste en el fortalecimiento de las actividades asociadas a la producción mediante técnicas de agricultura orgánica.

Dada esta necesidad, así como a las posibilidades del mercado internacional, consideramos que Colombia en su calidad de país con vocación agropecuaria, está en la obligación de preparar a los productores con miras a superar los retos impuestos por el mercado de los alimentos.

Así pues, el impulso de la producción orgánica debe ser un propósito común a los sectores público y privado mediante la adopción de estrategias y políticas públicas encaminadas a robustecer este sistema productivo.

Conscientes de esta realidad, en la Cámara de Comercio de Bogotá venimos apoyando desde hace 15 años esta actividad, y actualmente contribuimos a la construcción de una agenda sectorial uniendo lo público y lo privado cuyo propósito es robustecer la oferta institucional para facilitar las mejores prácticas regulatorias, de control y fomento para este tipo de producción.

Con ello, esperamos rodear conjuntamente al productor orgánico de las herramientas de asistencia técnica y transferencia tecnológica, financiamiento, encadenamiento productivo y capacitación capaces de preparar a la oferta de origen nacional para los retos sectoriales.

Desde el rol desempeñado por la CCB y en aras de fortalecer la competitividad y productividad de nuestros empresarios, extendemos una invitación al empresariado del sector a la construcción mancomunada y participativa de dicha agenda sectorial con miras a multiplicar los beneficios asociados a la producción orgánica.