Los cuidados a considerar durante la vejez de un perro braquiocefálico como el pug

El síndrome braquiocefálico es un problema de salud presente en determinadas razas de perro. La presencia de tos, estornudos, dificultad para ingerir alimentos tanto líquidos como sólidos y un aumento en la salivación, son algunos de los signos que obligan al dueño a tomar medidas centradas en la búsqueda de la calidad de vida de la mascota, aún más cuando llega a la vejez.

En los perros adultos mayores, los cuidados que se deben tomar incrementan significativamente. Gabriel García, gerente técnico de la Unidad de animales de compañía de MSD Salud Animal en Colombia, precisó en las características que presenta este síndrome, además de los aspectos a tener en cuenta cuando llega a la vejez.

Según García, los perros braquicéfalos son aquellos que, por las modificaciones genéticas que han tenido, presentan estructuras anatómicas diferentes al resto de los animales. Dentro de estas características físicas se encuentran una cabeza más corta, una cara más plana, huesos y orificios nasales con un tamaño un poco más reducido, el paladar blando mucho más alargado y un cuello más pequeño.

ARTÍCULO RELACIONADO

Lo que debe saber del calendario de vacunación de perros y gatos en el primer año

Todo esto hace que la tráquea tenga un tamaño un poco más reducido. Dentro de las razas más conocidas se destacan los bulldog inglés y francés, boston terrier, pekinés, pug, shar pei, shih tzu, bóxer, entre muchas otras.

Por las características anatómicas específicas, los perros braquicéfalos pueden llegar a desarrollar lo que se conoce como síndrome braquiocefálico o síndrome del perro braquicéfalo. Este conjunto de signos pueden afectar no solo la salud, sino al bienestar y calidad de vida de las mascotas.

"Este síndrome tiene su origen en un paladar blando de mayor tamaño, tanto en longitud como en espesor, en unos orificios de la nariz que son mucho más pequeños y una tráquea que tiene un diámetro mucho menor. Como resultado de estas características, los tutores van a notar que la mascota tiene ronquido, que no solamente se presenta cuando el animal duerme o descansa", dijo.

En casos más graves, las mucosas pueden observarse de una tonalidad azul e incluso se pueden producir desmayos en los animales.

El tratamiento del síndrome braquiocefálico en perros mayores dependerá de la gravedad y también del compromiso del bienestar que tenga el animal. Es necesario identificar los síntomas a tiempo para hacer un buen manejo de la mascota. Es allí donde las visitas frecuentes al veterinario son de gran ayuda para determinar cuál es la mejor opción de tratamiento.

"Cuando los casos son leves, se puede hacer un manejo farmacológico que incluya medicamentos que faciliten la respiración. En otros casos, la mejor alternativa definitivamente será la quirúrgica, pero en los perros adultos mayores, la cirugía puede ser un poco más complicada. Sin embargo, debe ser el veterinario el que evalúe el riesgo y los beneficios asociados a esta cirugía, comparándolos con la calidad de vida que puede tener o llegar a tener ese perro", indicó.

Es importante mencionar que, la mayoría de los signos de este síndrome, se presentan en animales adultos o en animales adultos-mayores. Es fundamental visitar el médico veterinario por lo menos dos veces al año, además de tener en cuenta los chequeos rutinarios de salud, la vacunación, las desparasitaciones internas y externas, la revisión del peso, el chequeo de la piel, entre otros.

García recomienda hacer actividad física de menor intensidad en días pocos calurosos, además de hacer uso de arneses y no de collares, que pueden ejercer una mayor presión en la tráquea.

También es clave evitar ciertos factores que pueden ser agravantes o incluso desencadenantes, como, por ejemplo, las enfermedades respiratorias, la obesidad, la diabetes, condiciones que puedan propiciar la inflamación generalizada, días de temperaturas altas o largas jornadas de ejercicio, entre muchos otros.